Puede que la balada y el metal presenten un fervor más constante y visible. Pero al momento de escoger un género que aún declare vigencia sin sobresaltos en el país, las opiniones saltan unánimes: todas las direcciones apuntan al grunge, el último gran movimiento del rock planetario y el soundtrack del desgano noventero que en 2011 cumple dos décadas desde su irrupción. Aunque su influencia nunca fue directa en las bandas de la época -el "grunge chileno" sólo latió en estrellas fugaces como Blu Toi y en ciertos momentos de Los Tres-, los históricos que dieron vida y muerte al estilo todavía escalan como parte de lo más rentable y popular de la cartelera musical chilena.
El precedente más inmediato sucedió esta semana. El lunes comenzó la preventa para el show que Pearl Jam dará el 16 de noviembre en el Estadio Monumental y, según reportan en la productora Time for Fun, en tres días se despecharon 18 mil boletos y se agotaron los sectores de Rapa Nui y Magallanes Lateral. No es casualidad que el triunfo lo exhiba el crédito más persistente del estilo y el único capaz de sobrevivir, a pesar de las deserciones y las carreras paralelas de sus miembros.
Tampoco es casualidad, porque hay registros cercanos: en 2005, cuando abrocharon su debut en el país, vendieron ocho mil localidades en seis días, lo que en ese momento se anotó como el recital con más rápida adquisición de entradas desde que la empresa Ticketmaster empezó a funcionar, en 1998. Las ventas totales de sus discos en Chile ascienden a 180 mil unidades y su título más popular,Ten (1991), ha alcanzado las 65 mil copias.
Otro héroe grunge luce credenciales similares y también puede reclamar con justicia parte del podio: Chris Cornell, la voz de los reunidos Soundgarden, vendrá por tercera vez al país y para liderar una de las jornadas del festival Maquinaria, que se hará el 12 y 13 de noviembre en el Club Hípico. Sus productores, la firma Transistor, cuentan que la cita ya ha comercializado nueve mil boletos y que los registros aumentaron luego del anuncio del show del cantante, materializado esta semana. En 2007, con su primera vez en Espacio Riesco, el hombre tras Black hole sun reunió a 10 mil personas, mientras que dos años después, cuando integró el cartel del Pepsi Fest en Movistar Arena, la concurrencia aumentó a 12 mil. Además, para esta vez se espera un espectáculo completo y que recorrerá todas las vidas de su discografía.
Aunque aún no hay informaciones oficiales, varias webs de fans ya informan de la visita a Sudamérica de Alice in Chains -el otro vértice del cuadrilátero grunge que completa Nirvana- para la última parte del año. El paso por la región ya está cerrado y su visita marcaría un desembarco histórico de figuras noventeras, pese a la muerte en 2002 de su voz, Layne Staley.
Y la contingencia en el sur coincide con una reverencia global al legado del grunge. Tal como en Chile, los propios Pearl Jam fueron los encargados de comandar los festejos. En enero lanzaron un compilado en vivo y dos meses después se atrevieron con las reediciones de Vs. y Vitalogy. Pero su celebración más estelar será el próximo 20 de septiembre, cuando se estrene en el Festival de Cine de Toronto el documental Pearl Jam Twenty, dirigido por Cameron Crowe y que muestra la vida y pasión del quinteto (su versión en DVD sale el 25 de octubre). Esta semana se liberó el trailer y las primeras imágenes asoman francamente conmovedoras.
Siete días después del estreno de la cinta está contemplado otro golpe a la cátedra: la reedición deNevermind (1991), la obra fundamental de Nirvana y el clásico mayor del grunge, en una edición de lujo con contenido nunca antes revelado. Por ejemplo, habrá una versión doble que contará con el álbum original remasterizado y otro disco con ensayos, tomas de descarte y sesiones para la BBC. Una edición aún más generosa tendrá ese mismo álbum doble más otros dos denominadosDevonshire Mixes, con la mezcla inicial del trabajo, y Live at the Paramount Theatre, con el hasta ahora inédito show de Halloween que dieron en Seattle en 1991.
Por lo pronto, la revista Spin trae en su edición de agosto un especial consagrado a Nevermind, con un disco tributo animado por nombres como Meat Puppets y Amanda Palmer, entre otros, y una portada con la pregunta "¿Qué significa Nevermind ahora?", cuya respuesta la entregan ilustres como Eddie Vedder, Wayne Coyne y Dave Grohl. A la luz de los hechos, hoy Nevermind y todo su legado siguensignificando mucho.
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